Ahorro energético
La envolvente de una construcción, desarrolla constantemente varios cambios
en forma de pérdidas y ganancias de frío y de calor.
De todos los factores que intervienen en estos cambios, las ventanas son los
elementos más fácilmente renovables y de mayor repercusión a la hora del
ahorro energético.
Las instalaciones realizadas con el máximo aislamiento, nos permiten además,
un ahorro de hasta un 40% de aire acondicionado en verano y un 60% de
calefacción en invierno.
Indirectamente de esta manera, contribuimos a una mejora medioambiental con
la reducción de emisiones de CO2 a la atmósfera.